Bariloche Dos Mil Trece
Nunca fui consciente de lo que en realidad eso significaba, perdí la cuenta la cantidad de veces que me dijeron "Disfrutalo", "Se te pasa volando, ni te das cuenta." Hoy a dos días de haber vuelto de la mejor semana de mi vida, puedo afirmar que esos consejos y palabras que hace algún tiempo subestimé, son totalmente certeras. Sonará trilladísimo pero juro que fue ayer cuando estaba de acá para allá corriendo para armar la valija, para estar pendiente de los últimos detalles que me faltaban para ir hasta la puerta de mi colegio y esperar ese colectivo que me iba a llevar a ese destino que esperé desde que estaba en primer año. San Carlos de Bariloche es como te la pintan, te re contra cagás de frío y como máximo llevás dos camperitas en la valija porque salís como en Buenos Aires, con tu banda alimentados por la inagotable energía del coordinador, empiezan a corear cantos cuando se cruzan con egresados de otras empresas, te quieren vender fotos con todo perro San ...