Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2019

Señorito X

Como empujar una puerta con un cartel enorme de “tire”. Como abrir un paquete de papas fritas que se siente lleno pero solo de aire. Yo me llevé puesto tu desinterés y me hizo mierda. Me la pasaba empujando cuando tenía que tirar. Cuando tenía que dejar de conformarme con promesas bien vendidas, con palabras azucaradas que al final no dicen nada. Cuando tenía que dejar de esperar el impacto de tu indiferencia. Y ahi estaba. Ya perdí la cuenta de las veces que me quedé ahi expectante  para verme a mi misma como una pelotuda importante mientras vos jugabas a ignorarme. Al fin y al cabo sos un adicto del juego retorcido del que me tenés como protagonista. Venis. Te divertís un poquito. Y te vas. Sin remordimientos. Sin darte vuelta mientras te vas desdibujando en la multitud. Pero eso solo se hace en las despedidas. Esto no es una despedida. Sos tan perverso que sabes que me quedo quieta. Quieta por vos. Quieta esperando a que vuelvas. Total te despedi en un millón de nuncas. Te putee en

Estoy bien mal

     Había pasado tanto tiempo que no recordaba cuando fue la última vez que me habían abrazado con tanta fuerza. Tus brazos me rodearon con firmeza pero con la mayor de las delicadez. Hacía mucho que te esperaba, pero no te vi venir. La vida se encargó de que te viera por primera vez cuando ya estabas casi en mi nariz. Llegaste y te quedaste. Por primera vez. Por primera vez no fui víctima de excusas y mambos ajenos, fantasmas de alguien más. Por primera vez no me pusieron a prueba. Ahí estabas en frente mío. Y te quedaste. Sin dubitar. Sin esperar mi aprobación. Pero yo no estaba ahí. ¿Y sabés que es lo peor? Que era capaz de morir por respirar los mismos besos que vos. Por compartirte mi universo del que tanto me avergüenzo. Pero no me salió. Y no me sale. Todavía me acuerdo las palabras exactas saliendo de tu boca: "Es tan simple como dejarse querer". Yo no sabía que decirte ¿Te acordás? Justo a mí me dijiste que eso. Que la calma nunca me pareció una prioridad y menos e